Cuando las mujeres cambiamos nuestro color de cabello lo que estamos buscando en el fondo es trasformando. Pero además ponemos mucho interés en que no parezca artificial, que nos quede brillante y que el color sea uniforme.
En la actualidad el color es lo que marca la tendencia, las cabelleras espontáneamente iluminadas están de última moda. Pero detrás de ese efecto natural hay un trabajo de los estilistas que combinan diferentes técnicas de coloracion (a veces entremezclando varios tonos) con patch y transparencias. Está comprobado que el 60% lo hace en casa. Pero para lograr un pelo de ‘tapa de revista’ hay una serie de puntos que vale la pena tener en cuenta.
Para una transformación radical hay que decolorar todo el pelo. Esta es una agresión muy fuerte y solo así posible:
Los castaños que se tiñen desde hace tiempo y quieren cambiar tienen que hacer una decoloración global. Y este es un trabajo profesional, que el colorista lleva a cabo de manera gradual y con una pasta a base de ceras suavizantes para respetar la tasa lipida del cabello. Las tinturas permiten bajar sólo de 2 o 3 tonos respecto del natural. Pero atención, que no es lo mismo en una melena que ya está teñida, en ese caso, es casi imposible aplicar una tonalidad más clara y que quede bien, porque las coloraciones no tienen el poder de aclarar sobre el matiz anterior.
Oscurecer es mucho más facil que aclarar. Por lo tanto, la que se aclaro y no está conforme con el resultado en la próxima aplicación puede utilizar un tono más oscuro para solucionar el problema.
En la actualidad el color es lo que marca la tendencia, las cabelleras espontáneamente iluminadas están de última moda. Pero detrás de ese efecto natural hay un trabajo de los estilistas que combinan diferentes técnicas de coloracion (a veces entremezclando varios tonos) con patch y transparencias. Está comprobado que el 60% lo hace en casa. Pero para lograr un pelo de ‘tapa de revista’ hay una serie de puntos que vale la pena tener en cuenta.
Para una transformación radical hay que decolorar todo el pelo. Esta es una agresión muy fuerte y solo así posible:
Los castaños que se tiñen desde hace tiempo y quieren cambiar tienen que hacer una decoloración global. Y este es un trabajo profesional, que el colorista lleva a cabo de manera gradual y con una pasta a base de ceras suavizantes para respetar la tasa lipida del cabello. Las tinturas permiten bajar sólo de 2 o 3 tonos respecto del natural. Pero atención, que no es lo mismo en una melena que ya está teñida, en ese caso, es casi imposible aplicar una tonalidad más clara y que quede bien, porque las coloraciones no tienen el poder de aclarar sobre el matiz anterior.
Oscurecer es mucho más facil que aclarar. Por lo tanto, la que se aclaro y no está conforme con el resultado en la próxima aplicación puede utilizar un tono más oscuro para solucionar el problema.
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